En la Jornada 12 del Clausura 2024, el estadio vibró con el último de los tres Clásicos Nacionales del mes, donde América y Chivas terminaron con un empate sin goles. Este resultado sigue al intercambio de victorias en la Concacaf Champions Cup, donde cada equipo se impuso una vez. El empate no solo reflejó la intensidad de la rivalidad sino también la paridad en el terreno, con ambos equipos mostrando destellos de brillantez pero sin concretar en goles. Este encuentro fue especialmente significativo por ser el cierre de una trilogía de clásicos, marcando un capítulo memorable en la historia de estos enfrentamientos.
La defensa de Chivas resiste el asedio del América.
Desde el inicio, el América buscó dominar, con Julián Quiñones liderando el primer ataque serio al minuto 7, aunque sin éxito gracias a la intervención de Raúl Rangel, guardameta de Chivas. El rebaño sagrado no se quedó atrás, y Javier ‘Chicharito’ Hernández tuvo una oportunidad clara que también fue frustrada por la defensa contraria. Ambos equipos intercambiaron roles de atacante y defensor a lo largo del partido, con América tocando la puerta en repetidas ocasiones, pero encontrándose con una zaga rojiblanca que negó cualquier intento de anotación.
América, manteniendo la presión, tuvo un momento destacado cuando Álvaro Fidalgo remató al travesaño, y Henry Martín casi abre el marcador en el rebote. Por su parte, Chivas encontró en Raúl Rangel a su figura, parando ataques clave y manteniendo el cero en su arco. Este empate dejó a Chivas en la undécima posición y a América en la segunda, resaltando la competitividad del torneo.
Durante el encuentro, ambos equipos no solo lucharon contra sus rivales en el campo sino también contra la presión de cumplir con las expectativas de sus aficionados, en un estadio dividido por pasiones. A medida que el reloj avanzaba, el juego se intensificó, con faltas y jugadas polémicas que aumentaron la tensión. Cristian ‘Chicote’ Calderón, enfrentando a su antiguo equipo, fue objeto de especial atención, recibiendo una despedida hostil de la afición rojiblanca al ser sustituido. Este ambiente cargado evidenció la magnitud del Clásico Nacional, no solo como un partido de fútbol sino como un evento cultural que moviliza emociones profundas en los seguidores de ambos bandos.
El partido también fue un duelo táctico entre los entrenadores, quienes realizaron ajustes buscando la ventaja. Las sustituciones y cambios de formación jugaron un papel crucial, intentando alterar el rumbo del juego. Sin embargo, la paridad técnica y táctica prevaleció, dejando en claro que ambos equipos estaban bien preparados y se conocían a la perfección. Este enfrentamiento dejó varias lecciones tácticas y puntos de reflexión sobre cómo se puede mejorar en futuros duelos. Aunque el empate sin goles podría considerarse decepcionante para algunos, subrayó la igualdad de condiciones y el respeto mutuo en el terreno de juego, anticipando futuros encuentros igualmente competitivos y emocionantes entre estas dos potencias del fútbol mexicano.
Con un punto se cierra la trilogía de enfrentamientos.
Históricamente, los Clásicos Nacionales son sinónimo de pasión y rivalidad, y esta trilogía no fue la excepción. América llegaba con un leve favoritismo tras avanzar en la Concacaf Champions Cup a pesar de una derrota en casa. Chivas, por otro lado, buscaba redimirse después de caer contra rivales directos como Cruz Azul y León en jornadas anteriores. Este empate actúa como un bálsamo para el rebaño, que enfrentaba críticas por su desempeño reciente.
Mirando hacia el futuro, ambos equipos se preparan para compromisos amistosos en Estados Unidos durante la fecha FIFA, seguidos de regresos importantes a la Liga MX el 30 de marzo. Chivas visitará al líder Monterrey, mientras América recibirá a San Luis. Este empate deja abiertas las expectativas para lo que resta del Clausura 2024, con mucho por definir en la lucha por el título y la clasificación a playoffs. Te invitamos a seguir NotiSports.com para más análisis y a compartir tus opiniones en redes. ¿Podrá Chivas escalar posiciones? ¿Mantendrá América su lugar en la cima? La emoción está garantizada.
